¿Qué es el drenaje linfático?
El drenaje linfático manual consiste en aplicar masajes suaves sobre diferentes zonas del cuerpo con el fin de mejorar la circulación de la linfa y el sistema linfático. El objetivo de este método es el de regenerar la contracción automática de los vasos linfáticos, ayudando a eliminar edemas y otras alteraciones derivadas de una mala circulación de la linfa.
El sistema linfático se ocupa de trasladar los deshechos derivados de la nutrición, desde las células hasta la sangre. Después, los transporta hasta el sistema excretor para eliminarlos. Cuando el sistema linfático no puede depurar ciertas zonas, los líquidos se atascan y es el momento donde aparecen los edemas. Aquí entra la importancia del drenaje linfático porque ayuda a arrastrar los líquidos retenidos hacia el sistema circulatorio y la sangre.
El hecho de que se aglomeren líquidos en los tejidos puede deberse a varias causas, como un mal funcionamiento del propio sistema linfático o por causas ajenas a la linfa, como en el caso de edemas venosos, linfedemas, edemas traumáticos, edemas durante el embarazo, cirrosis hepática, malnutrición, etc…
Metodología del Drenaje Linfático
Tiene que ser un masaje muy suave e indoloro, por lo que suele tener un efecto placentero y relajante.
Las manos deben hacer un movimiento lento y repetitivo que debe seguir, en cierta medida, la dirección de los conductos linfáticos.
Cuándo aplicar el Drenaje Linfático manual
DRENAJE LINFÁTICO POST-MASTECTOMÍA
Estamos especializados en la mujer tras Cirugía mamaria (mastectomía) mejorando la la circulación de la linfa a lo largo de la extremidad superior y evitando así casos extremos como la elefantiasis,…
Sesiones de 50-60 minutos donde tratamos al paciente desde la globalidad a través de las diferentes técnicas propias de la fisioterapia
Beneficios del Drenaje Linfático
Reactiva la circulación linfática y ayuda a eliminar el exceso de líquidos
Reduce la inflamación derivada de la retención de líquidos, regulando el tono muscular.
Mejora la circulación sanguínea y ayuda a eliminar problemas derivados de una mala circulación, como las varices.
Tiene un efecto analgésico, por lo que también se recomienda en dolores derivados de enfermedades como la fibromialgia.
Contribuye a mejorar las defensas del organismo al favorecer la función de los ganglios linfáticos.
Mejora el aspecto de la piel y combate enfermedades y afecciones como la celulitis o el acné.
Tiene un efecto relajante en el sistema nervioso, aliviando situaciones de estrés y ansiedad, pero también combatiendo los efectos de patologías como migrañas y vértigo.
Estimula la función renal a través de la reactivación de la circulación linfática